Paul Ricard fue un empresario francés, un experto en bebidas y filántropo, y lo más importante, uno de los fundadores de lo que hoy es Pernod Ricard.
Su fama parte de una bebida icónica del país galo, que producía Paul, es un licor aperitivo anisado conocido como “pastis”, que se disfrutaba en gran medida en Marsella y otras ciudades francesas. Esta bebida suele consumirse rebajada en agua, después de una buena comida. Y si bien durante la vida de Paul Ricard hubo algunos cambios en los estatutos legales para regular a las bebidas, el empresario supo mantener a flote su empresa, que llegó a ser reconocida mundialmente. La empresa siguió creciendo, y en 1975 se fusionó con su competidor directo para así crear Pernod Ricard.
Pero la vida de Paul Ricard no se limitó a los negocios de licores, sino que realizó muchas más cosas, una de ellas es aún conocida en el automovilismo deportivo, y es ni más ni menos que el Circuito de Fórmula 1 Paul Ricard.
Este circuito se ubica en la aldea medieval de “Le Castellet” y se inauguró en 1970, fue considerado para la época como uno de los circuitos más seguro del mundo, sede de distintas competencias de motor como Moto GP, WTCC, World Series by Renault y ELMS, pero sin duda lo más destacable son sus 14 Grandes Premios de Francia de la Fórmula 1 celebrados desde su creación hasta 1990.
A través de los años, el circuito ha recibido distintas modificaciones para seguir innovando en materia de seguridad, el cambio más significativo fue pasar de un asfalto de grava a uno de alto agarre, en 2018 se anunció el regreso de la F1 a este circuito.
Además de su pasión por el automovilismo, Paul Ricard era también un amante de los océanos. Es por eso que en 1963,junto a Alain Bombard, protestaron en contra del derrame de barro rojo en la comunidad de Cassis y tres años después decidieron fundar el Observatorio Marino en una región cercana a Marsella, Francia, con el objetivo de proteger el mar mediterráneo.
Durante 1968 se equiparon en el Instituto Oceanográfico Paul Ricard laboratorios de microbiología, oceanografía y zoología y en 1973 se creó un acuario público. En la actualidad su trabajo está centrado principalmente en contribuir a la mejora y control de la calidad sanitaria de los vertidos de aguas residuales, preservar la biodiversidad mediante la biología, la fisiología, la protección de la fauna y los ecosistemas marítimos.
Como puedes ver, la vida de Paul Ricard fue multifacética y emocionante, e incluso en sus últimos años siguió realizando labores importantes, ya que de 1980 a 1988, fue alcalde del poblado de Signes.
Unos años más tarde falleció,el 7 de noviembre de 1997 a la edad de 88 años y fue enterrado en la isla de Embiez, la cual era de su propiedad; su tumba se encuentra frente al mar Mediterráneo.