En los últimos años, a raíz de los avances tecnológicos y emergencias como la pandemia por COVID-19, tuvieron un auge importante las empresas y plataforma que hacen entrega de productos a domicilio, estas apps de delivery facilitan el abastecimiento de víveres y otros objetos hasta el hogar de sus usuarios.
Los costos accesibles y facilidad de acceso han convertido este formato de compra en el preferido de muchos consumidores, sin embargo, es valioso cuestionarnos el alcance que tienen estas plataformas y cómo pueden impactar en el hecho de que, sin los filtros adecuados, los menores de edad pueden llegar a comprar alcohol con estas apps.
En este blog te contamos más al respecto, además de algunos consejos para evitar este riesgo.
¿Qué tan fácil puede un niño adquirir alcohol a través de apps delivery?
Para los consumidores es más fácil no tener que asistir físicamente a una tienda para adquirir bebidas con alcohol, sino esperar en sus domicilios a que su pedido llegue por mensajería en pocos minutos. Las aplicaciones de delivery son en su mayoría gratuitas, lo que provoca que sea común tenerlas instaladas en nuestros celulares.
El peligro existe en que, al ser tan accesibles, no se tiene un control estricto de la edad de sus usuarios, y no hay manera de verificar que en cada pedido sea el titular de la cuenta quien realice las compras. Esto puede facilitar que los menores de edad se hagan pasar por otro comprador y adquieran este tipo de productos.
¿Cómo prevenir que un menor de edad ordene bebidas con alcohol a través de estas aplicaciones?
De acuerdo con el INEGI, en México alrededor de 60 millones de personas tienen un teléfono inteligente, y al menos 15.7 millones de hogares tienen alguna conexión a Internet, lo que hace común que los niños accedan a estos dispositivos, en muchas ocasiones sin supervisión.
En ese sentido, es prioritario mantener siempre cierto nivel de vigilancia de los padres o cuidadores a su cargo, mantener algunos niveles de control de la manera en que niños y niñas utilizan la tecnología, y si bien no se puede aislar a los menores del mundo virtual, sí puede limitarse las funciones o aplican que se instalan en sus dispositivos mediante métodos de control electrónico.
Pero este no es el único método ni el más importante, lo que verdaderamente debemos hacer como adultos promotores de la convivialidad y la responsabilidad, es hablar con los menores, establecer relaciones de confianza con ellos, y darles a conocer que el consumo de alcohol a su edad es perjudicial para su salud y su desarrollo. Una vez que ellos tengan esta información y sean sensibilizados al respecto, se deberán reforzar las habilidades para la vida con el objetivo de que ellos puedan tomar decisiones acertadas de forma independiente, cuidando siempre su propia integridad y la de sus conocidos.
Es importante que las empresas de estas aplicaciones también estén comprometidos a prevenir el consumo de alcohol en menores, pidiendo a los repartidores estar atentos durante sus entregas para percatarse si se trata de niños, pedir la presencia de un adulto y solicitar una identificación al momento de la entrega.
En Pernod Ricard promovemos la salud y seguridad de los menores, teniendo cero tolerancia al consumo de alcohol entre este sector. La mejor herramienta que podemos brindarles a los menores es una comunicación directa para hablar de los riesgos de beber alcohol a una edad temprana, promoviendo habilidades para la vida que les permitirán tomar decisiones certeras.